La gran mayoría de los cristianos por no decir todos, nos acercamos a Jesucristo o lo buscamos para que nos solucione o nos quite los problemas.
Cuando alguien busca a Jesucristo tan solo pare que le haga un milagro de sanidad, económico o de cualquier otra índole pasan dos cosas.
1. Cuando recibe el milagro se olvida de Dios.
2. Si no recibe el milagro se enoja e igualmente se aleja de Jesucristo.
Por esta razón Jesucristo está buscando adoradores en espíritu y en verdad. Juan 4: 23 “Mas la hora viene, y ahora es, cuando los verdaderos adoradores adorarán al Padre en espíritu y en verdad; porque también el Padre tales adoradores busca que le adoren.”
Los seres humanos sufrimos de constante insatisfacción, entre más tenemos más queremos, hoy Dios hace un milagro en nuestra vida y mañana ya estamos reclamando otro.
La única forma de tener y conservar una vida adecuada es si le pedimos a Jesucristo que nos restaure. Asaf tenía muy en claro que hasta no ser restaurado su vida seguiría igual. V 3, 7,19 “Oh Dios, restáuranos; Haz resplandecer tu rostro, y seremos salvos; Oh Dios de los ejércitos, restáuranos; Haz resplandecer tu rostro, y seremos salvos; ¡Oh Jehová, Dios de los ejércitos, restáuranos! Haz resplandecer tu rostro, y seremos salvos.”
De nada sirve que Dios haga milagros en nuestra vida si no los podemos disfrutar, tener salud, dinero y una hermosa familia no sirve de nada si no los podemos disfrutar.
La única forma de poder disfrutar lo que Dios nos da es si dejamos que Jesucristo nos dé una nueva vida.
Como somos Restaurados.
1. Dios nos da una nueva mente. 1 Corintios 2: 16 “Porque ¿quién conoció la mente del Señor? ¿Quién le instruirá? Mas nosotros tenemos la mente de Cristo.” solo si cambia nuestra manera de pensar cambiara nuestra manera de vivir. De nada sirve tener dinero si se sigue pensando como pobre.
2. Nuevo Corazón. Ezequiel 36: 26 “Os daré corazón nuevo, y pondré espíritu nuevo dentro de vosotros; y quitaré de vuestra carne el corazón de piedra, y os daré un corazón de carne” un corazón endurecido por los problemas y los afanes de esta vida no puede disfrutar de las bendiciones de Dios.
3. Nueva Voluntad. Hechos 22: 14 “Y él dijo: El Dios de nuestros padres te ha escogido para que conozcas su voluntad, y veas al Justo, y oigas la voz de su boca.” Nuestros propósitos cambian, ya no son de acuerdo a nuestra voluntad, ahora nuestros propósitos están sujetos a la voluntad de Dios.
4. Nuevo Espíritu. Ezequiel 36: 27 “Y pondré dentro de vosotros mi Espíritu, y haré que andéis en mis estatutos, y guardéis mis preceptos, y los pongáis por obra” solo con un nuevo espíritu podremos obedecer a las ordenanzas de Dios, un nuevo espíritu nos permite hacer lo que en realidad debemos hacer.
Solo si dejamos que Jesucristo nos restaure lograremos ser nuevos. 2 Corintios 5: 17 “De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas.”
Jesucristo nos hace nuevas personas es decir podemos ser mejores padres, mejores esposos o esposas. Jesucristo no solo quiere darnos salvación y vida eterna, él quiere darnos vidas de excelencia Jesucristo quiere dignificar nuestra vida.
La vida cristiana es mucho más que tan solo congregarse en algún lugar a la espera de un milagro, ser cristiano significa que nos sometemos a la soberanía de Cristo y le pedimos más que milagros materiales, le pedimos que nos Restaure que nos dé una nueva vida, los cristianos necesitamos ser mejores padres, mejores hijos, mejores esposas o esposos. Etc.
